Al definir una estrategia de marketing digital, suele repetirse la siguiente pregunta: «¿bajo qué KPI vamos a medir la performance?” Responderla es igual de importante que definir los canales en dónde invertir, el presupuesto o la creatividad. ¿Por qué? Descúbrelo a continuación:
Acrónimo de Key Performance Indicators (indicadores clave de performance), los KPI miden el desempeño de una estrategia de marketing digital. Es un conjunto de métricas que permiten evaluar la efectividad de determinadas acciones.
La pregunta “¿qué son los KPI?” tiene una respuesta distinta para cada campaña: si una estrategia busca aumentar el conocimiento de marca no se regirá por los mismos indicadores que una que apunta a la conversión.
Para elegir los KPI es importante definir los objetivos de la campaña. Por lo general, la meta suele ser la conversión, lo que se traduce en compras, suscripciones o descargas, entre otros. Este será el primer indicador de valor.
Luego, se pueden elegir métricas secundarias para registrar otros movimientos interesantes, como tasa de apertura, visitas únicas, engagement y más. En ese sentido, es importante considerar el modelo SMART a la hora de definir los KPIs:
1. Specific (específicos).
2. Measurable (medibles).
3. Attainable (alcanzables).
4. Relevant (relevantes).
5. Time bound (acotados a un tiempo definido).
¿Qué hay sobre la cantidad de KPIs? la verdad es que no es un factor relevante, pues todo depende de la campaña y sus objetivos. Sin embargo, la mayoría de las empresas elige entre 4 y 10.
Plataformas de análisis de datos como Google Analytics son fundamentales para medir y analizar los indicadores de rendimiento. Las redes sociales, los proveedores de email marketing, los CRM y otras herramientas similares ofrecen sus propios sistemas de evaluación también.
A la hora de evaluar cada KPI, es importante considerar data histórica, si se cuenta con ella, para realizar comparativos y saber si determinada campaña está rindiendo de la forma que esperábamos o no.
En marketing digital hay que tomar las decisiones rápidas: poco después de haber puesto en marcha una campaña puede ser necesario ajustar algunos de sus parámetros. En ese sentido, revisar los KPI en tiempo real permite realizar las modificaciones pertinentes para obtener los resultados deseados de una estrategia, resguardando la inversión y optimizando los recursos.
Es importante para toda estrategia de marketing digital, definir y analizar los KPI. Esto permitirá a las empresas identificar qué aspectos van por buen camino y cuáles precisan de cambios o correcciones.